El líder social y candidato a la Cámara por Córdoba, Luis Fernando Ballesteros, sostuvo un encuentro multitudinario con más de 300 habitantes del barrio Canán, en un acto de respaldo comunitario en el que reiteró su compromiso con la dignidad, la justicia social y la organización popular como caminos para transformar el territorio.

La reunión fue encabezada por los líderes sociales Jhonatan abad Rodriguez, Luis Cantero pestana, José acosta espitia, Emer de la rosa zuñiga, quienes abrieron el espacio reconociendo la trayectoria de lucha y solidaridad que Ballesteros ha construido junto a este territorio.

Ballesteros recordó que conoce de primera mano las luchas de Canán, ya que acompañó el proceso del barrio desde sus inicios y defendió los derechos de sus habitantes. Durante su intervención, rememoró una conversación que marcó su compromiso con la comunidad:

Cuando llegué aquí por primera vez, José me dijo algo que nunca olvidé: ‘¿Por qué los poderosos sí pueden tener tierra y los pobres no pueden tener aunque sea un pedacito para vivir?’ Me explicó que muchas familias pierden sus casas, sus negocios, sus hogares, porque los poderosos son dueños hasta de los humedales, mientras que a los pobres los sacan sin ofrecerles ninguna garantía. Esa es una gran injusticia.

El candidato enfatizó que la situación se agrava con la llegada constante de familias desplazadas por la violencia, que sobreviven de la informalidad y se ven obligadas a compartir viviendas entre cuatro o cinco núcleos familiares. “Eso no es justo”, afirmó, al tiempo que destacó la capacidad de resistencia de la comunidad.

Ballesteros recordó que Canán, hoy reconocido como barrio, nació como una invasión. “Yo vi un cartel que decía: ‘No somos invasores, somos poseedores’. Y tenían razón. Hoy no son una invasión: son un barrio. Ahora somos un barrio”, expresó ante los aplausos de los asistentes.

En su discurso, fue contundente frente a las prácticas clientelistas:

“El político muchas veces genera la pobreza para después salir a ‘solucionarla’ en elecciones con cincuenta mil pesos o una lámina. Pero cuando la gente deja de vender su voto y entiende que el verdadero poder está en sus manos, ahí empieza la revolución ciudadana que necesitamos en todo el departamento.”

Ballesteros aprovechó para hacer un reconocimiento público a los líderes de Canán:
“Este proceso no lo vendieron. Se mantuvieron firmes, con dignidad y con la convicción de que el cambio no se compra: se construye entre todos.”

Finalmente, hizo un llamado a la movilización popular de cara a la consulta del 26 de octubre, invitando a la comunidad a marcar el número 06 en el tarjetón del Pacto Histórico.

“Tenemos que llegar al poder para ser más fuertes. Canán tiene que reflejar su poder político en Montería y en todo el departamento.”