Se necesita una Policía de Tránsito más preventiva que represiva, una que piense menos en la multa y más en la vida.
Por: Oswaldo Marchena Mendoza
Twitter: @marchenojob
Hace rato vengo insistiendo que esa trillada campaña: “Si va a tomar, entregue las llaves”, está muy obsoleta y ya nadie le presta atención. No es por medio de ese vetusto slogan que vamos a combatir la accidentalidad vial, y menos, entregando volantes en las vías.
Si en estas fiestas de Navidad y Año Nuevo queremos preservar la vida en las vías de Córdoba, se necesita una verdadera política pública de seguridad vial, la decisión firme de las autoridades de tránsito, del Gobernador de Córdoba y de cada uno de los alcaldes del departamento.
Claro que se necesitan campañas de persuasión, pero las mismas tienen que ser más contundentes. La Policía Nacional tiene una excelente pieza publicitaria donde se plantea una pregunta: “Si va a tomar y a conducir, ¿en qué vehículo quiere viajar?”, y entonces está la foto de una ambulancia, una patrulla de la policía y un carro fúnebre.
No es posible que el exceso de velocidad, malas condiciones técnico mecánicas de los vehículos, microsueños y conductores embriagados, sigan apagando vidas en las vías. Imposible que autoridades de tránsito puedan revisar cada uno de los vehículos, pero sí hay formas de ejercer más controles en las carreteras.
Se necesita una Policía de Tránsito más preventiva que represiva, una que piense menos en la multa y más en la vida. Solo así empezaremos a bajar las cifras de accidentes viales.
Respetuosamente le aconsejaría al secretario de Tránsito de Córdoba, Martín Jalal, que antes de gastarse la plata de la Agencia Nacional de Seguridad Vial en volantes que terminan en la basura, que se vaya a las Terminales de Transporte de los municipios y les realice exámenes médicos y de alcoholemia a los conductores de buses intermunicipales, y así seguramente contribuiría a disminuir la accidentalidad en el departamento.
Accidentes que enlutaron hogares en vías de Córdoba
Para que en estas vacaciones no se repitan, recordamos algunos de los accidentes de tránsito con mayor impacto en las carreteras del departamento.
Los primeros accidentes de diciembre
Diciembre inició en Córdoba con un accidente de tránsito registrado la madrugada del domingo 3, en la carretera que comunica a Planeta Rica con Sincelejo, dejando un saldo de cinco personas fallecidas y quince con heridas. De acuerdo al informe de las autoridades, el vehículo involucrado en el accidente fue un bus de la empresa Brasilia que viajaba entre Medellín y Cartagena. Se habla como posible causa de los famosos microsueños.
Dos hermanas perdieron la vida en la vía Tierralta- Km 15 de Montería
El pasado 6 de noviembre, dos hermanas, Yuliana y Carol Cura Troncoso, de dieciséis y once años, murieron en un accidente de tránsito ocurrido en la vía que de Tierralta conduce al kilómetro 15. Iban con destino al municipio de Montelíbano, sitio donde residían junto con sus familiares.
Las primeras versiones señalan que toda la familia Cura Troncoso se movilizaba en una camioneta Duxter, conducida por el padre de las menores, Néver Cura, quien perdió el control del vehículo, dando varios botes en la vía y estrellándose luego contra una retroexcavadora que estaba a un costado de la misma. Hipótesis de las autoridades hablan de exceso de velocidad.
La mamá y sus dos hijas murieron atropelladas por un vehículo
El sábado 3 de junio, en el corregimiento del Retiro de los Indios del municipio de Cereté, ocurrió uno de los accidentes de tránsito de mayor impacto entre los cordobeses. Claudia Guerra Sánchez y sus dos hijas, Ester y Valeria Kardus Guerra, de dos y diez años, fueron atropelladas por un vehículo cuando intentaban cruzar la carretera tras salir de un culto. En el lugar de los hechos fallecieron la madre y la menor de dos años, mientras la otra niña falleció después de permanecer en cuidados intensivos.
De esta tragedia se sindica a Sergio Rhenals como la persona que conducía el vehículo en exceso de velocidad y quien abandonó el lugar de los hechos sin prestar auxilio a las víctimas del accidente.
La menor que perdió la vida en la glorieta de Mocarí
En la Glorieta de Mocarí, segundo anillo vial de Montería, falleció el pasado 18 de abril una niña de trece años, luego de caer desde la motocicleta en la que se transportaba como parrillera desde el colegio Iném José María Córdoba hasta su vivienda, en el corregimiento Los Garzones.
Según las versiones, el mototaxista que transportaba a la menor habría sido cerrado en su propio carril por una buseta de servicio público. Es oportuno recordar que en el momento del accidente, la menor no portaba el casco protector.
Mujer embarazada muere impactada por una moto
Julieth Paola Gómez Lozano, en estado de gestación, es la mujer que falleció la tarde del pasado domingo 15 de octubre, en un choque de dos motos que se registró en la vía a Planeta Rica, Córdoba. Aseguran los testigos, que Julieth y su hijo de tres años se transportaban en una moto cuando fueron chocados por detrás por otra motocicleta.
Para disminuir los índices de accidentalidad en las vías de Córdoba en estas Fiestas de Navidad y Año Nuevo, se necesita mucho más que campañas viales, es imperativo que las autoridades y los mandatarios, junto con sus secretarios de tránsito, asuman con vehemencia el compromiso de implementar las acciones necesarias que permitan preservar la vida en las vías.