El porcentaje de prevención de hospitalizaciones y muertes por COVID-19 del antiviral que lanza la farmacéutica estadounidense es de un 89%.
Pfizer anuncia un nuevo avance en la lucha contra la COVID-19. Después de ser una de las primeras compañías farmacéuticas en diseñar una vacuna para la enfermedad, ahora ha anunciado el lanzamiento de un nuevo antiviral.
Sin embargo, antes de que se comercialice, es imprescindible que este nuevo medicamento tenga el visto bueno tanto de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) como de la Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos (FDA). En el estudio realizado, Pfizer sostiene que ninguna de las personas que recibió el nuevo tratamiento murió, mientras que se registraron 12 muertes entre los que recibieron el tratamiento placebo.
El tratamiento, útil contra la variante Ómicron
La farmacéutica argumenta que la efectividad del nuevo medicamento contra la COVID-19 es de un 89% en la prevención de hospitalizaciones y muertes por coronavirus en pacientes con alto riesgo. Además, resultó ser efectivo contra la variante Ómicron, después de los resultados obtenidos en un estudio en el que participaron más de mil personas.
El director ejecutivo, Albert Bourla, argumentó el pasado mes de noviembre que los datos sugieren que este antiviral «tiene el potencial de salvar la vida de los pacientes, reducir la gravedad de las infecciones por COVID-19 y eliminar hasta nueve de cada diez hospitalizaciones«.
Además, Pfizer menciona la realización de un segundo estudio en adultos de riesgo estándar, en el que se pudo comprobar que la reducción era de un 70% con respecto al riesgo de hospitalizaciones y muertes por COVID-19. Con respecto al primer estudio, Pfizer asegura que se percibió unadisminución sustancial de la carga viral en el quinto día.
Paxlovid, un tratamiento administrado por vía oral
Este nuevo medicamento, que se comercializará bajo el nombre de Paxlovid una vez que reciba el visto bueno de las agencias reguladoras, será recetado para pacientes con COVID-19. Este tratamiento, que se administra por vía oral, debe tomarse dos veces al día (cada doce horas) durante cinco días, junto con otro medicamento, ritonavir.
La autorización de las agencias reguladoras de este nuevo antiviral para su administración en pacientes con COVID-19 supondrá un gran paso en la lucha contra esta enfermedad, en un contexto en el que los contagios se han visto incrementados por la detección de la variante Ómicron y en el que los países trabajan para inocular la dosis de refuerzo a su población.
Tomado de: as.com