Por: Domingo Cogollo Narváez
Como si fuera un objeto cualquiera, la periodista monteriana, residente en Corozal (Sucre), Olga Bru, decidió vender uno de sus riñones, para seguir el tratamiento de su hija Gabriela Sofía, a la cual le hicieron un trasplante de médula.
«Vendo riñón», es el patético y espeluznante mensaje, publicado anoche en Facebook, por la comunicadora social, quien además es sicóloga. Sin embargo, no puede ejercer las profesiones por falta de tiempo, ya que tiene que atender a la menor.
Aunque la EPS Sanidad de la Policía Nacional asumió los gastos del trasplante (a fuerza de tutela) por valor de 300 millones de pesos. Los padres de la menor tienen que hacer ingentes esfuerzos para el traslado a control a Bogotá.
La madre de la infante sindica de este hecho a la EPS que debe correr con los gastos para trasladarse a la capital de la República. No obstante, siempre le dicen que no hay plata, que pague de su bolsillo, y que después le reembolsan, pero eso no se está dando, a pesar de los incidentes de desacato interpuestos.
Como si fuera poco, el papá de la niña es agente de la Policía, y lo pasan moviendo de un lugar a otro, debido a las acciones judiciales interpuestas contra la institución para que pudieran atender a la menor.
Olga Bru espera la solidaridad de la gente pudiente de Sucre y Córdoba para no tener que desprenderse de su riñón, uno de sus órganos vitales. El miércoles 27 de septiembre le corresponde control a Gabriela Sofía, y la mamá, no cuenta con un solo peso.