La Corte Suprema de Justicia ordenó el traslado de ambos a guarniciones policiales y militares. Los dos exsenadores están citados el viernes para que definan su negociación con la justicia.
Varios acontecimientos ocurridos esta semana hacen que entre los congresistas se respire tensión. El primero, tiene que ver con la publicación de los detalles de una indagación preliminar en contra de 216 congresistas por el cartel de ‘la mermelada‘, lo cual ambientó lo que muchos consideran podría ser el siguiente gran escándalo de la corrupción.
Los temores se siguieron incrementando este miércoles, cuando la Corte Suprema de Justicia hizo un movimiento que es crucial dentro de las negociaciones que adelantan Bernardo Miguel Elías y Musa Besaile, los caciques electorales de la Costa. En Sala de Instrucción, los magistrados avalaron el traslado de ambos exparlamentarios a centros de reclusión policiales y militares, con el fin de darles más garantías de seguridad.
¿La razón? Ambos están citados este viernes para que entreguen la información anunciada y finiquiten un acuerdo con la Corte. Así las cosas, el alto tribunal les despeja el camino para que den el siguiente paso que puede ser arrollador para el Gobierno y para el Congreso.
Ambos han anunciado que delatarán las irregularidades ocurridas durante la campaña de reelección. También dicen que entregarán información frente a escándalos como Odebrecht, el cartel de la toga, y el más reciente, la asignación irregular de cupos indicativos.
Aunque la expectativa sobre lo que puedan decir dos de los exsenadores más votados del norte del país está en su punto, fuentes del alto tribunal aseguran que el impacto de las delaciones solo se podrá medir hasta el viernes, cuando entreguen nombres y hechos que están dispuestos a sostener bajo juramento ante la justicia.
La corte, por su parte, también tendrá que decidir qué les va a ofrecer a cambio. Actualmente Bernardo Elías aceptó su responsabilidad por los delitos de cohecho y tráfico de influencias, mientras enfrentará un juicio por los delitos de lavado de activos y concierto para delinquir por los sobornos de Odebrecht en Colombia.
Musa Besaile, por su parte, está llamado a juicio por cohecho y peculado, dentro de la investigación que adelanta la Corte Suprema de Justicia por el pago de $2.000 millones para frenar una orden de captura en su contra. Besaile tiene pendiente además la apertura de una investigación formal por parapolítica.
Así las cosas, Bernardo Elías y Musa Besaile saldrán esta misma semana del patio ERE SUR de la cárcel La Picota para ser llevados a centros de reclusión especiales. Esto implica que romperán de inmediato cualquier tipo de comunicación.
Tomado de: www.semana.com