Gremios y congresistas manifestaron que porcentajes anunciados por generadoras y comercializadores no tendrán mayor impacto en la reducción del costo de este servicio.
Las renegociaciones de los contratos entre generadoras y comercializadoras no tendrán mayor impacto en las tarifas de energía en la Costa. Esta fue la conclusión a la que llegaron varios sectores de la región Caribe entre gremios, comercio y congresistas.
Manifestaron que si bien se ha visto voluntad solo en algunas empresas para reducir el alto costo de este servicio, se hace necesario revisar y tomar medidas concretas frente a las pérdidas no técnicas que son el principal componente de la tarifa que eleva el valor de la facturación y consigo genera la mayor afectación a los usuarios.
De acuerdo con el senador liberal Mauricio Gómez, hasta el momento los anuncios hechos por el Gobierno nacional “no son concretos” y “no atacan la problemática particular del Caribe”.
“Nos encontramos a la expectativa y preocupados al mismo tiempo (…) el Caribe es la única región del país donde las pérdidas no técnicas las pagan los usuarios, esto nos ha llevado a tener incrementos cercanos al 70% en comparación a junio del año pasado”.
El congresista señaló que el buen resultado en la negociación de los generadores “ayuda un poco” pero se está muy lejos de resolver el problema con este tipo de medidas.
“Hasta que el Gobierno nacional no asegure los mecanismos inmediatos y estructurales que permitan mitigar está situación los usuarios no verán grandes alivios en las tarifas que nos están asfixiando a todos (…) los anuncios se conocerán el próximo lunes, esperamos el compromiso de las partes para beneficio de los colombianos o desde el Gobierno y el Congreso tomar medidas radicales”.
A su turno, el senador conservador Efraín Cepeda, precisó que estas negociaciones tendrán poco impacto debido a que la reducción será cercana al 10% para el Caribe colombiano.
“El impacto en la tarifa es muy pequeño todavía entre el 2% y el 3%. Sí comparemos ese porcentaje con el 45% que se ha incrementado la tarifa realmente poco impacto vamos a recibir en el Caribe”.
Cepeda hizo un llamado al resto de las hidroeléctricas que aún no se han pronunciado sobre el tema a que lo hagan y que definan la contribución que realizarán para lograr una disminución en el tema tarifario del país.
“Aunque se comienzan a dar algunos pasos hacia delante son insuficientes. Los demás eslabones de la cadena tienen que contribuir también. Creo que es la hora de qué el Ministerio de Minas y Energías actúe con mano dura sobre los eslabones de la cadena porque es vergonzoso que solo 6 hidroeléctricas hayan decidido renegociar los contratos”.
Aseveró que mientras no se impacte el tema de pérdidas poco es el resultado que se va a tener en tarifa “casi que confiscatoria qué se incrementó en el 45%”.
“La sobretasa a las hidroeléctricas que se aprobó en primer debate de la reforma tributaria, que debe generar unos $400 mil millones, tienen que ser utilizados para impactar el tema de pérdidas negras y hacia esfuerzos de normalización de redes eléctricas”.
El senador por el Pacto Histórico, Pedro Flórez Porras, destacó los avances en los acuerdos entre generadoras y comercializadoras, sin embargo, indicó que los porcentajes anunciados siguen siendo “insuficientes”.
Lo anterior, porque “el problema es el esquema tarifario y diferencial que se le aplicó a la Costa son las perdidas por robo de energía y mientras esto no se toque no va a pasar nada; y esto solo se solucionaría si el Ministerio de Minas y Energía derogue las resoluciones de la CREG que se expidieron en ese sentido”.
El parlamentario precisó que el componente de generación es el que más peso tiene en la facturación por lo que insistió en que se deben buscar alternativas para disminuir ese ítem de la fórmula y un mayor compromiso de los generadores de energía.
Agregó que el esquema tarifario aplicado a la Costa es “perverso y debe replantearse”.
“Hay que darle un tratamiento diferencial al Caribe, porque la solución al problema debe primero atacar el componente de pérdidas, si esto no se hace ninguna solución será suficiente para el Caribe (…) asimismo, buscar un acuerdo con el Gobierno nacional para definir una destinación específica para un fondo de mitigación. Este fondo también debe cubrir las necesidades de normalización eléctrica”.
El presidente Ejecutivo del Comité Intergremial en el Atlántico, Efraín Cepeda Tarud, coincidió con los congresistas en que los porcentajes anunciados de las negociaciones “no son significativos” para la reducción de las tarifas de energía cuando se han registrado incrementos del 50%.
Indicó que los anuncios del Gobierno nacional celebrando la disposición de algunas empresas “no resolverán la crisis que sufrimos en el Caribe, porque aquí las pérdidas por fraudes explican en gran medida los incrementos excesivos en las tarifas”.
“Le corresponde al Estado asumir estas pérdidas bajo algún mecanismo y actuar para erradicar los fraudes con medidas judiciales y con estrictos controles. También es su responsabilidad anticipar la modernización de la infraestructura del sistema de distribución de energía en el Caribe con inversión pública porque tiene responsabilidad directa en su deterioro lo que contribuye a incrementar las pérdidas y en consecuencia impacta la tarifa”.
El dirigente gremial hizo un llamado para que la sobretasa del 3% a los impuestos de las generadoras hidráulicas, que se ha planteado en la discusión de la reforma tributaria, tenga destinación específica hacia la inversión que permita resolver el problema de las tarifas en el Caribe.
Para el dirigente gremial, Ricardo Plata, el impacto de las negociaciones en las tarifas será “marginal” y “temporal”.
Sostuvo que el efecto no puede ser alto porque son acuerdos que dependen de la buena voluntad de una de las partes y porque el valor sobre lo que se está negociando, en el caso de los generadores, es sobre el 30% del CU (costo unitario), o sea de la tarifa por kWh.
“Si sobre ese componente del CU se lograra optimistamente una reducción del 15%, eso equivale al 15% del 30%, es decir del 4,5 % de la tarifa total, el potencial alto de disminución temporal. Además es una reducción que se aplaza y se cobra unos meses después con intereses, o sea, saldrá más cara después. Realmente es una pérdida de tiempo”.
Plata precisó, además, que estas negociaciones no resuelven el problema tarifario de la Costa. “No atiende el astronómico sobrecosto del CU en el Caribe que es el de las pérdidas negras o robo de energía, para llamar a las cosas por su nombre. Que equivale, ese solo rubro, a un incremento del 50% de la tarifa total que teníamos en la región hace un año”.
Dina Luz Pardo, directora de Asocentro, manifestó que mientras haya “desigualdad y abuso contra los usuarios del Caribe” no se puede hablar de una tarifa justa.
“No se verá la reducción con esos porcentajes anunciados. No es solo cómo se reformula y determina el valor del kilovatio/mes sino el tema de las pérdidas. El Gobierno ha centrado la atención en el primer ítem y ha descuidado el segundo”.
Pardo expresó su preocupación por los costos que podrían cargarse al usuario tras el acuerdo de generadoras y comercializadoras de diferir los valores de la tarifa. “Allí no estaremos hablando de un beneficio para los usuarios si no algo que están aplazando para pagar más adelante”.
Insistió en la necesidad de bajar la tarifa en un 30 % para que se vea reflejado un alivio real para los usuarios.
El experto en temas del sector eléctrico, Carlos Diago, celebró los avances que se han anunciado para bajar las tarifas de energía en el país. Señaló que las negociaciones entre generadoras y comercializadoras sí tendrán impacto en la reducción del costo de este servicio por el orden del 10 y 12 %.
Calculó que para el estrato 1 se tendría una rebaja entre 24 y 36 pesos; para el estrato 2 de 30 y 45 pesos; para el estrato 4 entre 60 y 90 pesos y para los estratos 5 y 6 de 72 y 108 pesos.
“Es un acuerdo de voluntades el reajuste de precios de los contratos a largo plazo de energía (…) las rebajas deben ser retroactivas a un año y el beneficio se verá reflejado en la facturación para los usuarios desde el mes de noviembre. Una rebaja del 12 % es importante para un problema generalizado”.
Indicó que para el caso de la región Caribe, el Ministerio de Minas y Energía anunció que entrará a revisar y conciliar el tema de las pérdidas no técnicas, el origen y sus afectaciones.
“La buena noticia es que cumplida esta parte (negociaciones entre generadoras y comercializadores) deben salir las resoluciones que dejen en firme las acciones. Para la semana del 18 de octubre se instalarán las mesas con Afinia y Air-e para revisar el impacto de las empresas por pérdidas negras y los supuestos acuerdos clandestinos que hicieron con el gobierno anterior”.
Tomado de: El Heraldo