*Marta Saenz Correa

familiaEl dialogo es uno de los factores más importantes en las relaciones interpersonales, pero lo es todavía más en las relaciones de la familia. El aprendizaje del lenguaje es muy importante para la comunicación; los gestos, las miradas, la expresión de la cara, son elementos que pueden ayudar a comunicar sentimientos y motivaciones, y favorecen un clima familiar acogedor.

La comunicación se basa en sentimientos, y en información tanto objetiva como subjetiva que transmitimos, recibimos y comprendemos, y que nos sirve para establecer contacto con las personas cercanas a nuestro entorno, para expresar y comprender lo que pensamos, y para unirnos. Cuando existe comunicación en una familia es probable que exista compañerismo, complicidad y un buen ambiente de unión y afecto en la casa, sin embargo lograrlo no es tarea fácil.

El principal problema radica en que vivimos en un mundo donde la televisión, la radio, y el internet, no permiten que tengamos una sana comunicación con nuestra familia. Cuando nos sentimos solos, en vez de buscar a los padres, hermanos, o familiares, preferimos buscar en internet a personas desconocidas para compartir lo que nos sucede.

Es en familia en donde nos sentimos refugiados, en donde podemos comunicarnos con toda sinceridad sin preocuparnos si vamos a ser juzgados o criticados por los demás, en donde nos escuchan con amor y nos aceptan tal como somos. Es el lugar por excelencia para aprender a comunicarnos y expresar sentimientos de dolor, tristeza, pena, alegría, amor, etc.

Es obvio que no existe una regla básica para la comunicación en el hogar, porque cada familia tiene sus particularidades, pero existen pautas que facilitan este proceso como son la voluntad, el interés, y la disponibilidad por parte de los miembros que la conforman para intentarlo. Recuerden que la forma fundamental de expresarse en familia es el dialogo, pero no es la única.

La doctora Margaret Mc Gavin propone algunas recomendaciones para lograr una comunicación abierta, efectiva y afectiva en casa: aprende a esperar, no fuerces las confidencias; aprende a escuchar; practica una actitud receptiva y demuestra un interés sincero, nada mata más la comunicación que el interrogar e interrumpir para exponer tu punto de vista; quita los distractores, apaga el celular, la televisión y el computador, con tus acciones demuestras a tu interlocutor que sus palabras valen más para ti que todos los mensajes ajenos; aparta un tiempo y espacio, concede a cada miembro de la familia la importancia que se merece en escucharlo.

Mis amigos, los invito a crear espacios en casa que faciliten la comunicación con la pareja, los hijos y el resto de la familia.

Nota adicional

Es en familia en donde nos sentimos refugiados, en donde podemos comunicarnos con toda sinceridad sin preocuparnos si vamos a ser juzgados o criticados por los demás, en donde nos escuchan con amor y nos aceptan tal como somos. Es el lugar por excelencia para aprender a comunicarnos y expresar sentimientos de dolor, tristeza, pena, alegría, amor, etc.