Tomado de: grandes medios
Según dijo ayer el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon en Etiopía, el mundo ha logrado cumplir su sexto Objetivo del Milenio, que consistía en detener y revertir la epidemia, por lo que ahora es momento de dar un nuevo paso para acabar con ella.
“Nuestra nueva promesa es acabar con el sida mediante la construcción de un futuro sostenible, equitativo y saludable para todos”, aseguró durante la presentación de un informe sobre balance y previsiones de la agencia de Naciones Unidas encargada de este asunto, Onusida.
Según este informe, en 2014 el VIH aún afectaba a 37 millones de personas en todo el mundo, si bien las nuevas infecciones se redujeron en un 35 por ciento y las muertes relacionadas con el mismo cayeron un 41 por ciento. Además, se consiguió frenar el avance o detener la epidemia en 83 países, que representan el 83 por ciento de toda la población que padece el VIH.
“Hemos detenido y revertido la epidemia en el mundo”, aseguró Ban, quien no obstante recordó que el sida “no ha terminado en ninguna parte del mundo”, puesto que la epidemia también ha aumentado cerca de un 20 por ciento en otros 56 países.
“Aún existen grandes brechas y barreras, a las que a menudo se enfrentan los colectivos más vulnerables”, admitió el secretario general de la ONU, quien reiteró la importancia del acceso universal a la sanidad para “no dejar a nadie atrás”.
Más logros
Otro de los grandes objetivos alcanzados en los últimos años ha sido la reducción del precio de los retrovirales, algo que ha permitido que unos 15 millones de personas puedan acceder actualmente a estos medicamentos, frente a las 700 mil que lo hacían en el año 2000.
Hace 15 años un tratamiento anual de retrovirales tenía un costo aproximado de 10 mil dólares, mientras que en la actualidad este mismo tratamiento no supera los 100 dólares. “Hoy en día, quince millones de personas reciben tratamiento del VIH para salvar sus vidas. Ricos o pobres, el derecho a la sanidad es de todos”, añadió el responsable de la ONU.
Cómo hacerlo
Para lograr la erradicación en 2030, será necesario conseguir que el 95 % de los seropositivos conozcan su condición, que el 95 % de ellos reciba tratamiento y que el 95 % de los mismos suprima su carga viral.
Y para ello será necesario movilizar a los enfermos, educar y fomentar la independencia económica de mujeres y adolescentes, así como terminar con la discriminación hacia las personas seropositivas y avanzar en la investigación médica.