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Momentos cuando recibieron los equipos para panadería

En el Ceibal, municipio de Monería, despegó en el año 2013 el proyecto “Jóvenes a lo bien”, liderado por la oficina de juventudes de la Alcaldía de Montería, con el apoyo del Sena, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y la Policía Nacional, en un programa que agrupó a 30 personas entre jóvenes y madres cabezas de familia del sector, con el propósito de crear una unidad productiva y generar espacios de convivencia ciudadana.

El programa lo llevó el gobierno municipal de la época a los habitantes del Ceibal, para atenuar el impacto de un centro de resocialización de menores infractores, que se estableció en el sector, y las comunidades se oponían al funcionamiento del mismo en el barrio.

IMG-20160518-WA0022Gabriel Moreno de la oficina de juventudes quedó como responsable de la ejecución y viabilidad del proyecto que contó con toda una infraestructura para poner a funcionar una panadería, 750 mil pesos para pagar los primeros meses de arriendo e insumos propios de la industria de la panadería para empezar la unidad productiva con los jóvenes y madres, quienes fueron capacitados por el Sena para tal fin.

Los equipos, insumos y recursos, fueron recibidos por el entonces presidente de la Junta de Acción Comunal del Ceibal, Faider Peña Polo; pero hasta el sol de hoy, parece que en la boca del horno se quemó el pan, porque hasta el momento, ni pan, ni insumos, ni recursos ni equipos, todo es un misterio porque el proyecto nunca despegó y la comunidad quiere que aparezcan los equipos y se retome el proyecto.

Hace un año firmaron acta para retomar el proyecto, pero el mismo vive el sueño de los justos.

Darío Díaz Hernández, integrante actual de la Junta de Acción Comunal, le dijo a La Ventana, que hace un año, Gabriel Moreno de la oficina de juventudes de la Alcaldía de Montería, junto a miembros de la policía nacional, asumieron el compromiso de reactivar el proyecto, así como establecer el sitio donde están los equipos para revisar su estado, pero hasta el momento todo quedó en promesas.

“Hay un comportamiento permisivo de Gabriel Moreno, con Faider Peña Polo, porque no se justifica que después de tanto tiempo, el primero no le exija al segundo, donde están los equipos, para que la comunidad reactive el proyecto”, señaló que toda la infraestructura para la panadería tiene un costo aproximado de 25 millones de pesos.

Personas del sector le dijeron a La Ventana, que vecinos observaron en su momento como muchos de los insumos que entregaron para el funcionamiento de la panadería, fueron a parar a la basura, o se destinaron para labores ajenas al proyecto.