Cerca a un proceso democrático de elección, es oportuno destacar los resultados positivos en las auditorías de los entes de control entre 2016 y 2020, calificando la gestión de la universidad como eficiente y transparente.
Por: Oswaldo Marchena Mendoza.
@marchenojob
No se dejó picar por el animal de la política, y al final la balanza de sus posibilidades se inclinó del lado de la academia. Por ello, ante la solicitud de cerca de 2 mil 500 personas que firmaron una iniciativa digital promovida por estudiantes, y de otros estamentos universitarios, el rector de la Universidad de Córdoba, Jairo Torres Oviedo, decidió aspirar a ser reelegido para un nuevo periodo.
En un departamento donde se han visto disminuidos los verdaderos liderazgos, y tras el derrumbe moral de tradicionales jefes políticos, la gestión al frente de la Universidad de Córdoba, ubicó a Torres Oviedo en un abanico de posibilidades políticas, que pasaban por el Congreso de la República e incluso la misma gobernación de Córdoba.
Cuando uno habla con Jairo Torres, queda un mensaje, que en algunos casos pareciera que viene del político que se quedó en la academia, o del académico que le hace falta a la política. Estamos hablando de la verdadera política, esa que es capaz de construir grandes proyectos sociales a favor de las comunidades.
Por años la Universidad de Córdoba estuvo secuestrada por intereses políticos, había funcionarios que cobraban sin ir a trabajar, los laboratorios carecían de reactivos e insumos para fortalecer el aprendizaje, y para llegar a los cargos funcionaba el famoso “papelito” con la firma de un jefe político. La violencia se paseaba por los pasillos de la alma mater, y todas esas circunstancias adversas sepultaron los sueños de muchos bachilleres de alcanzar un título profesional, sobre todo a los de sectores humildes, sin opción de migrar a la educación superior privada.
La Academia destruyó la politiquería.
Por este túnel gris se asomó un proyecto liderado por la academia que presentó la candidatura del profesor Jairo Torres Oviedo a la rectoría de la Universidad. En diciembre del año 2015, Torres Oviedo fue elegido como nuevo rector de la Universidad de Córdoba. Aquella elección no fue fácil y se llevó a cabo en medio de un ambiente tenso. En esa oportunidad 6 integrantes del Consejo Superior votaron para que un egresado de la institución ocupara su rectoría.
Revisando archivos y notas de prensa encontré que hay mucha simetría entre las propuestas del entonces candidato a rector, Jairo Torres Oviedo, y de su gestión al frente de la Universidad de Córdoba. Tras aquella dura elección Torres Oviedo, señaló: “Quiero poner al servicio de la sociedad mi programa el cual se fundamenta en el tema de la internacionalización y la globalización, porque pese a que esta es una universidad de provincia, debe estar articulada con el mundo global” (El Universal 18 12 2015).
Precisamente, en el portafolio de su gestión, está el haber logrado la Acreditación Internacional de 2 programas académicos (bajo el modelo ARCUSUR); Máximo número de convenios internacionales vigentes, con 85 (a dic. /2019); Cifra récord en profesores participantes de actividades de movilidad saliente en 2018, con 79 y en profesores participantes de actividades de movilidad entrante en 2019, con 55.
También muestra importantes cifras en estudiantes participantes en actividades de movilidad saliente en 2018, con 39 y entrante durante el mismo año con 54. Decir a raja tabla, que Jairo Torres ha cumplido su propuesta de internacionalización es una verdad absoluta.
El meridiano de la gestión de Jairo Torres, pasa por lograr aglutinar las fuerzas políticas más relevantes del departamento para fortalecer la universidad y ponerla al servicio de la transformación de Córdoba y eso solo lo consiguen los buenos políticos, o los académicos con bases políticas fundamentadas. Torres Oviedo pertenece a ese grupo de líderes que lo difícil lo vuelven cotidiano.
En la rectoría que busca repetir hay otros logros no menos importantes, pero liderar la transformación del departamento desde la academia marca la brújula de su gestión. No se nos olvide que en medio de la pandemia, el rector de Unicor se fue a la calle a llevarles mercados a los estudiantes de zonas humildes, a motivarlos a que no abandonaran sus sueños de ser profesionales.
Bajo su rectoría se logró la obtención de registro calificado de 17 nuevos programas académicos, cifra récord en estudiantes inscritos en programas pregrados en 2018-1, con 10.423, porcentaje de deserción semestral por debajo del 8% en 2019, vinculación de 65 nuevos docentes de planta en 2016, logro de 19 cupos en becas doctorales para profesores de la institución en la Cohorte 1 de la Convocatoria de Colciencias Becas Bicentenario, Mejor Categorización de grupos de investigación en la historia de la institución, logrando tener 36% en categorías A1 y A, y Cifra récord de investigadores reconocidos por MinCiencia, con un total de 106.
Educación Gratuita.
“La Educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo”, dijo Nelson Mandela. En medio de una pandemia donde muchas personas han perdido su empleo, y que ha contribuido con elevar los niveles de pobreza, el rector Jairo Torres Oviedo tras una importante gestión con el Ministerio de Educación, la Gobernación de Córdoba, la Alcaldía de Montería, y con el apoyo de otras alcaldías del departamento, diseñó y sacó adelante la gratuidad de la matrícula para el segundo semestre del presente año. Ese solo motivo, sin revisar los demás logros (los pocos enunciados aquí por la falta de espacio), es suficiente para tenerlo de nuevo al frente de la rectoría.
No podemos olvidar que bajo su administración se creó e implementó el modelo de proyección “Córdoba Transformada”, con los programas: Córdoba Bilingüe, Córdoba Aprende, Córdoba Creativa y Competitiva, Córdoba Mis Primeros Pasos, Córdoba Cualificada y Córdoba Verte Verde. Su labor permitió la consecución de la sede propia de la Universidad en Montelíbano, y gestiones para recibir la sede en el municipio de Sahagún.
Cerca a un proceso democrático de elección, es oportuno destacar los resultados positivos en las auditorías de los entes de control entre 2016 y 2020, calificando la gestión de la universidad como eficiente y transparente. La Acreditación Institucional por 4 años y la Acreditación de calidad de 9 programas académicos, respaldan la aspiración de Jairo Torres.