“El traje de independiente que le confeccionaron a Vargas Lleras con el cuento de las firmas, no está hecho a su medida, no le queda bien, de lejos se nota que ese vestido es prestado”.

 

Por: Oswaldo Marchena Mendoza.

En Twitter: @marchenojob

Hay prepagos que de día fungen como damas respetables de la sociedad y por las noches se visten de forma atrevida para conquistar clientes, pero por más que cuiden su doble papel, al final su condición de mujer nocturna termina imperando sobre su falsa apariencia diurna. En la política se están presentando situaciones semejantes, y aclaro que me refiero solo a eso, no estoy tratando de prepago a ningún candidato o candidata.

Los ciudadanos en las encuestas están castigando de forma severa esa doble investidura del candidato Germán Vargas Lleras, quien a diario recorre las calles del país buscando firmas para inscribir su candidatura, mientras que al final del día, en recintos cerrados, arma alianzas patrocinadas por su partido Cambio Radical, ese que desprecia en público pero que ama en privado.

Seguramente si el nieto del expresidente Lleras no replantea su estrategia,como los equipos de fútbol que no rinden, se irá sumergiendo al fondo de la tabla, en este caso de las encuestas. El tema de las firmas no le luce a un candidato que tiene a su servicio toda una poderosa maquinaria que logró armar en sus años de Vicepresidente al lado de Juan Manuel Santos.

El traje de independiente que le confeccionaron a Vargas Lleras con el cuento de las firmas, no está hecho a su medida, no le queda bien, de lejos se nota que ese vestido es prestado; su hábitat natural es Cambio Radical, uno de los partidos políticos más cuestionados en Colombia porque repartió avales a personas que hoy están investigadas y otras condenadas.

Los ataques a Petro y Fajardo.

No puede ser coincidencia que dos contralores afines a Cambio Radical hayan enfilado baterías contras directos competidores de Germán Vargas Lleras, como son Gustavo Petro y Sergio Fajardo. Juan Carlos Granados, contralor de Bogotá, y quien le impuso millonarias sanciones a Petro, llegó al cargo impulsado por la bancada de Cambio Radical en el Concejo de Bogotá, y precisamente esas sanciones podrían sacar a Petro de la carrera política.

El otro francotirador de Cambio Radical es el contralor de Antioquia, Sergio Zuluaga Peña, cuyo organismo de control embargó al exgobernador de ese departamento, Sergio Fajardo, precisamente días después que el candidato anunciara una alianza junto a Claudia López y Jorge Robledo, para ir juntos por la Presidencia. Los medios han señalado con detalles la relación de Zuluaga Peña con Cambio Radical.

Del mismo grupo de seguidores del exvicepresidente se han escuchado quejas por esta persecución a los referidos candidatos Petro y Fajardo, y es algo que los colombianos no le están perdonando a Vargas en las encuestas y le pasarán cuenta de cobro en las urnas.

El desprecio de Vargas a la paz.

El candidato Vargas Lleras y su armada de congresistas le acaban de dar un golpe a la paz, al conocerse que su partido Cambio Radical, en el pasado uno de los incondicionales de Santos en la llamada Unidad Nacional, se apartó del debate para la reglamentación de la Jurisdicción Especial para la Paz en el Congreso.

El partido de Lleras argumentó que “esta iniciativa premia de manera significativa y desequilibrada a los miembros de las Farc”. El director del partido Cambio Radical, Jorge Enrique Vélez, salió a meternos los dedos a la boca, tras señalar que fue una decisión autónoma de los congresistas y que Vargas Lleras nada tuvo que ver con la decisión, como si en ese partido se moviera algo sin la autorización del exvicepresidente.

A este episodio se le puede dar una lectura fácil, Vargas lleras se mueve de acuerdo al péndulo de la opinión pública y no por principios sólidos. El presidente Juan Manuel Santos está con el sol a sus espaldas y viviendo quizá su peor momento político, lo extraño es que quien fuera su Vicepresidente, se aparte de la paz, el tema más importante del Gobierno Nacional, y que él ayudó a sacar adelante cuando hacía parte del mismo.

¿Hacia dónde se mueve Vargas?

En el país real, de donde salen los votos para elegir a los presidentes, se comenta que el candidato que más se posicione en el centro tiene un gran chance de ocupar la Presidencia, y precisamente ello está favoreciendo a Sergio Fajardo, quien en las diferentes encuestas se mantiene en los primeros lugares. De todos modos, Fajardo corre el riesgo de acercarse a la izquierda debido a su coalición con Claudia López y Jorge Robledo.

El gran problema de Vargas Lleras es que no lo aceptan en la derecha, que representa el Centro Democrático de Álvaro Uribe Vélez, y aunque tiene una gran distancia con la Izquierda, pocos lo ubican en el Centro. El candidato de Cambio Radical representa la derecha, pero los dueños de esa franja en Colombia, como Uribe, el exprocurador Ordoñez, Martha Lucía Ramírez y Andrés Pastrana, consideran que su contubernio con Santos en el Gobierno Nacional lo alejó de esa corriente.

Está cantado que el próximo Presidente de Colombia lo impondrán fuertes coaliciones, y es difícil ver a Vargas Lleras en alguna de ellas, a no ser que se dé un desastre en el Centro Democrático, y Uribe y sus muchachos decidan acompañarlo en la segunda vuelta para evitar un triunfo de la izquierda. Mientras tanto, Vargas está en un pantano.