*Marta Saenz Correa

El 3 de mayo de 2011, la Asamblea General de las Naciones Unidas decide designar el 30 de julio como el Día Internacional de la Amistad mediante Resolución A/RES/65/275. En su motivación, la ONU manifiesta que a través de la Amistad, cultivando lazos de camaradería y fortaleciendo la confianza, podemos generar cambios importantes y necesarios para tejer una red de apoyo social que nos proteja a todos y generar pasión para lograr un mundo mejor. Se escoge esa fecha siguiendo la propuesta realizada por la Cruzada Mundial de la Amistad, organización paraguaya fundada en 1958 con el fin de promover la creación de un día mundial de la amistad.

En nuestro país, lo conmemoramos el tercer sábado del mes de septiembre y es una celebración tradicional en la que amigos, conocidos, enamorados, novios, esposos y amantes se expresan su amor y cariño.

Que mejor oportunidad para reflexionar sobre la pregunta: ¿Quién es un verdadero amigo?. La verdadera amistad se prueba cuando hay desacuerdos. Los verdaderos amigos, son los que no te eliminan de su vida cuando no conciden con tus pensamientos o actuaciones y tienen el valor de señalar las faltas y de aconsejar con cariño. No todas las personas con las que tenemos un trato continuo son nuestras amigas. Ni todos quienes se dicen nuestros amigos lo son de verdad. Ni el egoísmo, ni la envidia caben en una amistad. Las amistades profundas y sinceras son escasas y, por eso mismo, debemos aprender a valorarlas.

Los buenos amigos son un bálsamo para la vida y un antídoto contra las enfermedades físicas y emocionales. Un amigo de verdad te conoce tal como eres, comprende donde has estado, te acompaña en tus logros y tus fracasos, celebra tus alegrías, comparte tu dolor y jamás te juzga por tus errores; es una roca que nos sirve de apoyo y ancla. De tus debilidades sacará tus fortalezas y por más torpe o débil que te sientas, siempre habrá cosas que solo un amigo de verdad, es capaz de ver y fomentar.

A veces nos preocupamos por tener amigos, dada la poderosa influencia que tienen en nuestra vida, pero tal vez deberíamos concentrarnos en ser buenos amigos. La amistad exige dedicación, y se honrrado y leal con la otra persona. En otras palabras, el buen amigo es el que se preocupa de verdad por uno. Pero el sentimiento debe ser mutuo; se requiere comunicación, esfuerzo y sacrificio de las dos partes. Hable con su amigo sobre las cosas que les gustan a ambos. Escúchelo, respete sus opiniones y, siempre que sea posible felicítelo y dele ánimo.

PARA DESTACAR:

«No camines delante de mí, puede que no te siga. No camines detrás de mí, puede que no sea un guía. Solo camina a mi lado y se mi amigo”. Albert Camus.