Blanca Castro. Madre Comunitaria
Blanca Castro. Madre Comunitaria

Por: Oswaldo Marchena Mendoza y Mauricio Castilla Castro.

En Twitter, @marchenojob y @pulsodeltiemo2.

Varias protestas se presentaron en los CDI, Los Araujos, Los Recuerdos y en Villa Melisa, de Montería, tras conocerse que el nuevo operador Coobienestar, informó que algunas madres comunitarias que habían transitado a los mencionados CDI, serían trasladas a otras zonas de Montería, lo cual generó que las servidoras y padres de familia protestaran a la entrada de los CDI.

Blanca Castro madre comunitaria del CDI Los Araujos, manifestó que 11 madres que transitaron al mismo, junto con la comunidad y padres de familia, lucharon y sacaron adelante el CDI, que en el pasado estuvo convertido en un elefante blanco, y ahora cuando el CDI cuenta con toda su infraestructura, gracias a los esfuerzos de sus trabajadores y docentes, llega un nuevo operador, Coobienestar y despide a la gente idónea que venía laborando.

Sostuvo que el nuevo operador está vinculando a personas de otro lugar y en la selección de los nuevos trabajadores solo tienen en cuenta a familiares de los directivos de la nueva Fundación. “Dos madres comunitarias fuimos trasladas y ello afecta la cobertura del CDI, el cual hoy atiende a 143 niños, a quienes les van a vulnerar sus derechos con la reducción de personal para su debida atención”, subrayó.

A su turno Yesenia Padrón Ávila, madre comunitaria que labora en el CDI de Villa Melisa, sostuvo que en el mismo bajaron la cobertura por el despido de personal. “Sacaron a una auxiliar, a una manipuladora de alimentos, una servidora de aseso y una docente, algo que perjudica la atención a los niños”, aseveró.

Yesenia Padrón. Madre Comunitaria
Yesenia Padrón. Madre Comunitaria

“Hoy me informaron que me van a trasladar a una vereda en zona rural, lo cual lesiona mis derechos y la atención de los 140 niños”, afirmó.

 En Cereté se repite la masacre laboral de operadores de ICBF.

Un total de 18 trabajadores entre docentes, personal de talento humano, oficios varios y de cocina  del CDI Divino Niño, con sede en el barrio El Prado, adscrito al Bienestar Familiar, denuncian que sus contratos fueron liquidados sin justificación y despedidos sin previo aviso, además dejó a un grueso número de menores sin cupo.

El ICBF trajo una fundación al parecer de Barranquilla y sacó al personal local. Los trabajadores denunciaron que como si fuera poco, las nuevas directivas no tuvieron en cuenta que algunos tienen 18,19 y 20 años respectivamente de servicio activo.

“A pesar de que somos antiguos no le pararon bolas a eso, nosotros venimos trabajando desde hace mucho tiempo con esta entidad y de un momento a otro sin motivos no sacan, y lo peor colocan personas no aptas; es decir trajeron gente de otro lado” explicó  Luz Marina Morgan, docente despedida.

Aquí lo que hay es una masacre laboral contra los empleados que estaban en el Divino Niño, advirtió una empleada de asuntos generales.

¡Es politiquería!

Para el proceso, de selección del personal que ingresó a suplir los puestos vacantes hay “manos de politiquería” metida en el asunto, expuso uno de los afectados.

“Tengan en cuenta los años de servicio, las cosas no se hacen así arbitrariamente, como ocurrió aquí, exigimos que se aclare, la situación lo antes posible” indicó Luis Espinoza, padre de familia perjudicado.

Por su parte Aidé Rambao Anaya, de asuntos generales, manifestó, “A mí los funcionarios de la nueva Fundación  me dijeron que no servía, pues estaba muy vieja y me echaron sin misericordia”, puntualizó.

Protestas en Cereté.
Protestas en Cereté.