El excandidato presidencial Rodolfo Hernández conoció, en primera instancia, el monto de la pena que deberá pagar por el caso Vitalogic, ocurrido cuando fungía como alcalde de Bucaramanga.
El juez décimo penal del circuito con función de conocimiento de Bucaramanga sentenció a Hernández a 64 meses de prisión (cinco años y cuatro meses) por interés indebido en la celebración de contratos.
Producto de su estado de salud, el exalcalde de la capital santandereana cumplirá la condena con el beneficio de casa por cárcel debido a un cáncer que ha deteriorado su salud.
Adicionalmente, el exsenador de la República tendrá que pagar una multa de 66,66 salarios mínimos legales mensuales vigentes. También estará inhabilitado para ejercer cargos públicos durante 80 meses (seis años y ocho meses).
El pasado 14 de marzo, entre lágrimas y en medio de una audiencia correspondiente al caso Vitalogic, Rodolfo Hernández anunció que padece un cáncer terminal.
«De todo pensaba, menos terminar procesado por cosas que no hice», aseguró el fundador del partido político Liga de Gobernantes Anticorrupción, insistiendo en su inocencia.
Durante esa diligencia judicial, Germán Peñaloza, fiscal encargado del proceso, pidió sentencia condenatoria en contra del político santandereano por el mencionado escándalo de corrupción.
En 2023, el excongresista fue diagnosticado con cáncer de colon, una enfermedad que afecta, en la mayoría de los casos, a las personas de avanzada edad. Los tratamientos consisten en cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapia dirigida o inmunoterapia.
En diálogo con el diario El Tiempo, Hernández dijo que notó algo raro en su zona abdominal, describiendo el síntoma como «sentirse lleno». «Lo extraño es que esos dolores ocurrían cuando no había comido absolutamente nada», explicó el ingeniero.
Posteriormente, en un chequeo médico, le confirmaron que estaba perdiendo sangre y que tenía anemia, luego de identificar úlceras en su estómago.
En otra entrevista con Semana, el exalcalde de Bucaramanga contó detalles de la cirugía con la que buscaban extirparle el cáncer y que lo dejó sin voz: «Varios de los días en UCI me tuvieron con un tubo ancho en la garganta, eso fue horrible».
A principios de mayo pasado, el exmandatario de los bumangueses tuvo que ser operado de urgencia en el Hospital Internacional de Colombia (HIC) como consecuencia de una recaída durante el tratamiento al que está sometido para el cáncer.