Mientras el gobernador Orlando Benítez Mora dio a conocer la cifra de 45 mil damnificados por las inundaciones en Córdoba; alcaldes de los municipios más afectados divulgaron guarismos diferentes.

El jefe de la Administración Departamental dijo que 45 mil personas se encuentran damnificadas por la temporada de lluvias en 28 de los 30 municipios de esta sección del país. Si esa cantidad se divide por 4, que es el promedio del núcleo familiar, estaría dando 11.250 familias.

Otro dato, entregado por el mandatario seccional, precisa que los municipios más afectados son Lorica con 15 mil personas y Ayapel con 3 mil 500 damnificados. Si esas dos cifras se llevan a familias, representan 3.750 y 875 en cada uno de esos municipios.

Entretanto, en las alcaldías se habla de cifras diferentes. Por ejemplo: en Lorica, se dice que son 5.600 familias; Ayapel, 3.600; San Bernardo del Viento y Momil, 2.000 cada uno; Ciénaga de Oro, 1.600 y Purísima, 800 familias.

Solo en esas cifras suman 14.800 familias. Si se multiplica por cuatro, arroja cerca de 60.000 personas damnificadas. Solo en seis municipios de los más afectados, de un total de 28.

Pero en Lorica hay inundaciones desde comienzos del mes de mayo pasado cuando el río Sinú se desbordó por la boca Nueva Colombia en Cotocá Arriba y por el perímetro urbano de Palo de Agua. Los dos corregimientos se hallan ubicados en la margen izquierda del río Sinú.

Esa vez las corrientes de agua anegaron no solo a Cotocá Arriba y Palo de Agua, sino a los corregimientos de Nariño y Cotocá Abajo. También las aguas afectaron a El Playón y otras veredas de esa zona agrícola y ganadera.

Como si fuera poco, a finales del mes de junio volvió a crecer con fuerza el río, y otra vez se desbordó por Nueva Colombia (Cotocá Arriba) y por Palo de Agua, al igual que por otros sectores de las riberas del Sinú.

En esta oportunidad las aguas hicieron más estragos que en la ocasión pasada, puesto que el boquete de Nueva Colombia solo alcanzó a ser controlado al mes y medio de haberse abierto en esa parte de la orilla. La boca de Palo de Agua fue tapada más rápido.

También el perímetro urbano de Lorica ha sido anegado en gran parte. Esa localidad considerada como ‘la capital del Bajo Sinú’, está rodeada por aguas: el río Sinú, el caño de Aguas Prietas y el caño Chimalito, lo mismo que la ciénaga Grande.

Pero la situación de Ayapel es todavía más grave, si se tiene en cuenta que desde hace un año esa localidad está con el agua al cuello debido al rompimiento de la boca Cara e’ Gato, en el río Cauca, jurisdicción de San Jacinto de Cauca, Bolívar.

El boquete de Cara e’ Gato no ha podido ser controlado, a pesar de que hace un año el Gobierno Nacional invirtió más de 20 mil millones de pesos y luego aprobaron 10 mil millones más. Todos esos recursos han sido como arrojarlos al río. La boca tiene hoy, una extensión superior al kilómetro y medio.

Las aguas en esa parte siempre se dirigen a la ciénaga de Ayapel, lo que produce inundaciones en la zona rural y la parte urbana de esa municipalidad ubicada al oriente del departamento de Córdoba.

El gobernador Benítez Mora dijo que han estado prestando ayuda a las comunidades más afectadas, y además, están a la espera de que lleguen los productos alimenticios ofrecidos por el presidente Petro, para que los damnificados puedan mitigar el hambre que están pasando en estos momentos.