Un llamado a los colombianos para que comprendan que no se necesita ningún tipo de agresión para exigir atención médica vital, hizo la Junta Directiva de la Asociación Colombiana de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos, ACESI, a propósito del acto violento protagonizado en días pasados en el hospital Carlos Carmona Montoya que hace parte de la Red de Salud Suroriente de Cali, en donde más de diez personas con armas de fuego exigieron que se le salvara la vida a un ciudadano que llegó gravemente herido a la sección de urgencias.

“La vida y la salud como derechos fundamentales nos obligan a los médicos y a cualquier profesional o personal asistencial, a poner estos dos preceptos por encima de todo. La atención médica no se regula por orden de llegada sino por su gravedad. Un herido con arma de fuego en donde su vida esté en peligro, desde luego activa todos los códigos hospitalarios. En ese instante clave, no analizamos quién es, si está o no afiliado o si su EPS está al día o tiene contrato con el hospital. Nuestro máximo deber es salvar a ese ser humano y punto”, dijo categóricamente la directora Ejecutiva de ACESI, Olga Lucía Zuluaga Rodríguez.

La vocera añadió que no había ninguna necesidad de intimidar y amenazar de muerte al cuerpo médico, a las enfermeras y demás personal de la ESE Carlos Carmona el pasado viernes.

“Es una infracción contra la Misión Médica, contemplada en todos los códigos nacionales e internacionales. Todo el equipo estaba consciente que su deber supremo era salvarle la vida a ese ciudadano y hacer hasta lo imposible para estabilizarlo, como desde luego se hizo, para proceder a un posterior traslado a un centro médico de mayor complejidad, que tuviera los equipos, la tecnología y el personal entrenado para una cirugía”, explicó.

Finalmente, Olga Lucía Zuluaga invitó a la comunidad a que comprenda que las personas vinculadas al sector salud, a la hora de atender a un paciente y a enfrentar una situación extrema, no escatiman esfuerzos, “porque reiteramos, la vida es un bien superior precioso para todas y todos. Nosotros siempre haremos hasta lo imposible y mucho más, para preservarla. No hay ninguna necesidad de que nos amenacen para cumplir ese mandato, que además hace parte de nuestros juramentos más íntimos de los cuales estamos totalmente convencidos, por encima de cualquier cosa”, puntualizó.